
Sammy Teusch, un niño de 10 años residente en Greenfield, Indiana, se suicidó tras sufrir acoso constante en la escuela debido a su apariencia física.
Su familia informó que Sammy era víctima de burlas por sus gafas y dientes, y fue acosado tanto emocional como físicamente, incluyendo un ataque en el autobús escolar.
A pesar de los repetidos esfuerzos de sus padres por informar a la escuela sobre la situación, afirman que sus preocupaciones fueron desatendidas.
