
El caso de los padres de Adelaida, Australia, acusados de fingir que su hijo de 6 años padecía cáncer para recaudar dinero, conmocionó a la comunidad local y puso en evidencia la extrema crueldad de este tipo de fraudes. Todo comenzó cuando la madre del niño publicó en redes sociales que su hijo estaba recibiendo tratamiento para un supuesto cáncer ocular. Poco después, la pareja, ambos de 44 años, abrió una página de crowdfunding para recaudar fondos para el tratamiento del niño. Sin embargo, las autoridades pronto descubrieron que toda la situación era una mentira, y que el niño jamás había recibido tratamiento alguno.
Este engaño, que implicó el uso de las redes sociales para pedir donaciones y la manipulación física del niño para hacer que pareciera enfermo, generó una respuesta rápida de la policía, que desde el 26 de noviembre inició una investigación. La pareja, seg{un detalla The Guardian, está ahora enfrentando acusaciones graves, incluidos dos cargos de negligencia criminal y fraude, después de que se descubriera que el dinero recaudado, aproximadamente USD 60.000, nunca fue destinado a un tratamiento médico real.
Según la información proporcionada por la policía, el plan de la pareja para hacer creer que su hijo tenía cáncer fue meticulosamente ejecutado. La madre, que trabaja como peluquera en el oeste de Adelaida, pidió la ayuda de una colega para afeitarle la cabeza y las cejas al niño. Este acto fue parte de un intento por simular los efectos secundarios típicos de un tratamiento de radioterapia, como la pérdida del cabello. Luego, colocaron al niño en una silla de ruedas y lo envolvieron en vendajes, para dar la impresión de que estaba recibiendo tratamientos médicos como la radioterapia estereotáctica, que es una técnica precisa y especializada para tratar ciertos tipos de cáncer.
