Un estudio realizado por la Universidad de Rutgers-New Brunswick advierte sobre las consecuencias que una guerra nuclear total entre Estados Unidos y Rusia tendría en el planeta.
El estudio revela que un conflicto de esta magnitud podría desencadenar un invierno nuclear global.
Con temperaturas bajo cero incluso en el hemisferio norte durante el verano, lo que llevaría a una escasez de alimentos y a la muerte de la gran mayoría de los 7.700 millones de habitantes del mundo. Los investigadores, utilizaron un modelo climático avanzado para simular los efectos de una confrontación nuclear entre las dos principales superpotencias.
Se estima que se liberarían alrededor de 150 millones de toneladas de humo negro en la atmósfera, provenientes de incendios en ciudades y zonas industriales, lo que bloquearía la luz solar y tendría consecuencias catastróficas para el clima y la vida en la Tierra.
Ante la posibilidad de una guerra nuclear accidental, los científicos advierten sobre la necesidad urgente de eliminar las armas nucleares como medida preventiva para evitar una catástrofe de proporciones globales.