
La designación del nuevo director de la Penitenciaría Nacional La Victoria trae consigo el hecho de su apresamiento en el 2011, por prestar su habitación a recluso para tener relaciones sexuales.
Roberto Nivar, quien en ese momento fungía como encargado de Seguridad de la cárcel de Baní, fue apresado ese año, luego de que realizaran una inspección en el centro penitenciario y sorprender al reo Enrique Soto, de 51 años, teniendo relaciones íntimas con una mujer de 24 años.
De acuerdo a una información difundida por el portal SIN en el citado año, en ese momento, el jefe de la institución policial, José Armando Polanco Gómez, recomendó al Poder Ejecutivo la cancelación de Nivar.